A la hora de elegir nuestra contraseña para entrar en internet, tenemos que pensar que algunas son fácilmente adivinables. Normalmente a un hacker le cuesta poco dar con tu password, así que imagínate si encima le facilitas la tarea.
El género humano es así. A la hora de buscar una contraseña segura para utilizar en internet, lo que hace es buscar una contraseña lo más fácil posible para recordar. Quizás por ello, aunque nos parezca impensable, el password que usamos como seguro y personal sea utilizado por millones de personas en el mundo.
Si en esta lista está tu password, más vale que lo vayas cambiando.
123456
Esta es un clásico entre los clásicos. Cualquier persona, hasta un niño pequeño, si tuviera que elegir una secuencia absurda de números, sería ésta. Hay quien piensa que por colocarla en orden descendente: 654321 es mucho mejor. ¡Nada más lejos de la realidad!
Fecha de cumpleaños:
Otro clásico habitual. Y todavía hay gente que se molesta en añadir el día y el mes, porque hay quien solo pone el año de nacimiento. Pero si naciste el 19 de noviembre de 1966 y pones: 191166 como password, lo normal es que cualquier conocido que quiera accder a tus datos pueda hacerlo sin problema.
I Love you
Lo pongas en inglés, español o chino mandarín, escribir una declaración de amor como ésta es servir a los hacker en bandeja toda tu vida. Es un clásico entre los cursis, pero un clásico al fin y al cabo, así que ni se te ocurra usarlo como password.
Tu peli favorita:
Supongamos que te encanta Pretty Woman y crees que eres la única persona en el mundo a la que le encanta este pastelón. Pues mejor que no des pistas a nadie y no lo utilices de contraseña para moverte en internet, porque seguro que habrá quien pueda saber a través de tus gustos en Facebook que eres fan de esta peli. Y si no puedes resistirte, al menos moléstate y combínalo con algún numerito (por ejemplo la fecha en la que la viste por primera vez).
Nombres de hijos o cónyuge:
Otro modo de poner en bandeja tu password al mundo es utilizar los nombres de tus familiares más cercanos: pareja, hijos, novio, perro… Más que nada porque, sin darte cuenta, son datos que a menudo das alegremente en redes sociales tipo Facebook, por lo que estás haciendo el trabajo al hacker. Vale que estés orgulloso de tu familia, pero no seas tan inocente de utilizar sus nombres o se volverá contra ti.
Publicación original: Periódico Hoy